Hola.
Hola, como estas.
Bien y tu.
Bien.
Parece que te interrumpí.
No, no importa.
Si importa… disculpa, no lo quise hacer.
No te preocupes. No era nada secreto.
Entonces me puedes contar.
Si. Estaba pensando en una escena.
¿Una escena?
En realidad en cómo sería la escena donde se daría un dialogo
¿Cómo un dialogo?
O sea… es que pensé en un dialogo…mas bien dicho, se me ocurrió algo que podría decir alguien, y estaba pensando en la escena ideal para que lo dijera.
Tal vez te puedo ayudar. ¿Qué se te ocurrió que dijera?
Es que sería algo así: están los dos sentados en un café.
¿Un café es medio cliché, o no?
No importa. Están sentados en un café. Frente a frente. Ella esta mirando la galleta que tiene en el platillo de su capuchino tibio y a medio servir, y juega un poco con la cuchara como para distraerse, mientras el le dice:
Sé que amarme no es fácil.
Es como abrasar un árbol.
No de los de campo, si no uno de ciudad.
Porque primero da vergüenza abrazarlos y que te vean.
Pero luego uno los empieza a querer y a darse cuenta de que ellos también lo abrazan a uno, aunque no tengan brazos.
Pero amarte a ti, es como abrazar a la tierra.
Tan enorme, perfecta, hermosa;
Que cuando nos acercamos a abrazarla es tan inalcanzable que nuestras carencias nos hacen creer que no podemos hacerlo, por que no nos dan los brazos, aunque no tengamos.
Tal vez ella siempre lo supo pero no lo quiso saber.
¿Qué cosa?
Que el… lo que el sentía. Tal vez los dos se han equivocado en creer que el otro es inalcanzable por más cerca que esté.
¿Tu que crees? ¿Ellos están empezando o terminando algo?
¿Yo que creo? ¿En qué momento dejamos de hablar de la película?
¿Qué película?
En la que estabas pensando.
Era una escena. Pero no de una película.
¿Cómo?
Era más que todo una situación, imaginaria… y no.
De hecho…como te explico, siempre has sido tú la del café y yo el que teme perderte; debe ser por que a veces creo que eres tan hermosa que te sé divina, poco humana y eso mas que asustarme, me detiene, hace que me dé el tiempo de dejar que el tiempo pase, para contemplarte y no tenerte, y ese es el problema, que no vivo para tenerte, sino que me gustaría que quieras despertar una mañana con un susurro mío y entre abras los labios antes de medio abrir tus ojos mientras te estiras, y sin siquiera pensar que hora o día es, desees que sea fin de semana toda la semana, solo para que estemos juntos.
¿Por qué nunca me lo habías dicho?
Si te lo he dicho, pero nunca cuando estamos juntos.
Tienes razón, parece que siempre lo he escuchado, pero no estaba segura de que eras tú.
Es que siempre supe que cuando te encontrara podría amar.
Te quiero.
Yo también.